de mayo de 2022
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La apertura institucional busca generar condiciones para la incidencia efectiva de las personas en las
decisiones públicas, explicó María del Carmen Nava, Comisionada del INFO CDMX.
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Participó en el panel Gobernanza, Apertura institucional, Gobierno Abierto, ¿De qué se trata?, en el marco
de la Semana de la Transparencia 2022 en la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla.
La cocreación ayuda a eliminar el miedo en las comunidades y construir confianza entre las personas en situación de
vulnerabilidad, enfatizó María del Carmen Nava Polina, Comisionada Ciudadana del Instituto de Transparencia, Acceso
a la Información Pública, Protección de Datos Personales y Rendición de Cuentas de la Ciudad de México (INFO CDMX),
quien consideró que una forma de cocrear fue el desarrollo de la “Caja de Herramientas para el empoderamiento de la
mujer”, que surgió del trabajo entre la sociedad civil, academia, instituciones públicas y privadas, así como de
órganos autónomos.
En el marco de la Semana de la Transparencia 2022, realizada en la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP),
la Comisionada detalló que la apertura institucional busca generar condiciones para la incidencia efectiva de las
personas en las decisiones públicas, más allá de las urna, de manera que las políticas públicas atiendan sus
prioridades.
Durante su participación en el panel Gobernanza, Apertura institucional, Gobierno Abierto, ¿De qué se trata?,
explicó que sí es posible cocrear, muestra de ello -dijo- fue la puesta en marcha del “Decálogo de Apertura y
Anticorrupción en COVID19” que concentra información para prevenir, reaccionar y recuperarse frente a una emergencia
como la pandemia por el SARS COV 2.
El Decálogo es una herramienta, coordinada por Estado Abierto del INFO CDMX, en la que participaron más de cien
actores de diferentes ámbitos. Esta acción visibilizó cómo la transparencia proactiva es indispensable en coyunturas
de emergencias como la pandemia.
Como ejemplo describió que “el Decálogo lo adoptaron en Perú con una iniciativa de cocreación para poder impulsar la
economía de personas artesanas indígenas peruanas a través de gestar una aplicación, por ejemplo, en el contexto de
la pandemia y con la connotación de cero turismo, cero ventas y el desconocimiento del uso de una plataforma
digital. Esto es un ejemplo de cómo en la medida de nuestras posibilidades sí podemos utilizar la apertura
institucional para generar una respuesta social, desde la iniciativa privada o desde la iniciativa pública”.
Nava Polina aseguró que es de suma importancia promover más transparencia en la gestión pública y mayor
participación de las personas para cocrear las soluciones a los problemas públicos.
Señaló que en la actualidad existe una crisis de confianza hacia las instituciones de representación popular como es
el caso del Congreso de la República y los partidos políticos.
Además, “tenemos instituciones poco eficaces en la perspectiva de las personas, como se mostró en el Índice de
Estado de Derecho del World Justice Project donde se refería a que una de cada siete personas confiaba en las
personas juzgadoras, es un nivel bajísimo. La vacuna es tener instituciones abiertas, contar con un Estado Abierto
en los hechos y no solo en el discurso, ese es el reto público que tenemos”, subrayó.
Nava Polina apuntó que de acuerdo al estudio del “Latinobarómetro 2021 dos de cada diez personas prefieren regímenes
autoritarios, uno de los indicadores que a nivel mundial nos tienen alerta de si estamos en plena crisis de sistemas
democráticos y requerimos contrapesos en los distintos poderes del Estado, para ello, debemos promover las
condiciones para que haya confianza, que haya respuestas públicas a necesidades cocreadas”.
Para generar confianza y certeza en las personas, es necesario que la apertura institucional esté en la toma de
decisiones en todos los niveles, desde el municipal hasta el Federal e incorporar las propuestas de los diferentes
grupos sociales que componen la sociedad, especialmente los más vulnerables, afirmó.
Es de suma importancia generar una cultura de paz positiva y mantener un diálogo con las personas en un lenguaje
sencillo, finalizó.
También participaron Margarita Lubreras Hernández, Investigadora del Instituto de Ciencias de Gobierno y Desarrollo
Estratégico de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (ICGDE-BUAP) y Maximiliano García Guzmán, catedrático de
la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM)
