A medida que las empresas aprovechan las tecnologías avanzadas para recopilar y analizar los datos de sus usuarios, la necesidad de dar prioridad a la privacidad y la seguridad de esta información cada vez se vuelve más importante, pues se trata de elementos fundamentales para el éxito de cualquier estrategia de marketing. Con la proliferación de puntos de contacto digitales y el crecimiento exponencial de los datos de los clientes, hoy las marcas se enfrentan al reto de salvaguardar la información confidencial de accesos no autorizados, violaciones y usos indebidos.
La nuestra es sin duda una era fuertemente caracterizada por estrictas regulaciones de protección de datos, tanto a nivel local como internacional, ejemplo de ello son el artículo 12 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, el Reglamento General de Protección de Datos (GDPR), la Ley de Privacidad del Consumidor de California (CCPA) o en México la Ley Federal de Protección de Datos Personales.
Estas normativas impulsan la creación de protocolos de seguridad que no solo protegen la información de los usuarios, sino también lo que ellos consumen. De ahí que gigantes como Google o Apple hayan desarrollado frameworks y tecnología que todos los días analizan y protegen cientos de datos valiosos tanto de los usuarios como de las marcas, incluyendo los anuncios y por supuesto, la data relacionada con compras y consumo de cada persona.
Es por lo anterior que uno de los principales retos es la complejidad de gestionar diversas fuentes de datos mientras se respetan las normas de privacidad. De hecho, durante 2023, la inversión publicitaria para conducir a la instalación de aplicaciones fue una de las principales víctimas de la recesión económica en 2023, mientras que iOS creció un 2% interanual, la inversión publicitaria en Android se desplomó 10%, de acuerdo con Appsflyer. Lo anterior nos obliga a los marketeros a estar preparados ante los cambios de privacidad que ya están sucediendo.
La clave para el futuro es ayudar a las marcas a crecer a partir de aliados inteligentes que logren aprovechar los datos e insights, mientras cumplen con la privacidad de los usuarios, respetando su seguridad.
IA para navegar los nuevos paradigmas
La integración de la API de Audiencia Protegida (PAAPI) de Google y las constantes actualizaciones de la ATT, conducen a que el intercambio de información entre las aplicaciones de marketers y publishers, así como, sus correspondientes plataformas de tecnología publicitaria tengan que verse en la necesidad de evolucionar constantemente.
En el caso del API, la segmentación será la estrella que posibilite llegar a los usuarios, pues, en lugar de depender de un identificador compartido, como se hace hoy en día, las audiencias se crearán en el dispositivo para un targeting mucho más personalizado, de esta manera, todos los datos serán almacenado en el dispositivo sin permitir que ningún third-party acceda a él.
Las normativas de privacidad y seguridad de datos conducirán a que los usuarios se agrupan en audiencias personalizadas según los rasgos compartidos o el uso de las aplicaciones, en este punto la inteligencia artificial juega un papel determinante, pues aliados como albert de Zoomd posibilitan hacer esta segmentación de forma óptima, certera y actualizada constantemente, lo que posibilitará que los anuncios lleguen al usuario sin ser detenido por el propio API o haciendo que el usuario se siente identificado con el contenido y acceda a compartir sus datos con la aplicación, superando con ello las limitaciones del ATT.
Una oportunidad para conectar
Si bien es cierto que la intención de tecnologías y frameworks de privacidad es regresarle al usuario el control de sus datos, lo cierto es que a través de la transparencia y efectividad de la IA, los lazos de conexión pueden reforzarse si se logra una estrategia que, más allá de centrarse solo en los gustos del cliente, vea por su seguridad.
Las marcas necesitan generar confianza en los consumidores para que se sientan más seguros de que sus datos están a salvo y se utilizarán de forma responsable al crear experiencias personalizadas, con lo cual, se mejore el valor del ciclo de vida del cliente. Es por eso que implementar herramientas y prácticas sólidas que aprovechen los datos de forma transparente puede garantizar que un análisis seguro que se refleje en la confianza del usuario, puesto que actualmente, cerca del 82% de los consumidores se sienten algo o muy preocupados por cómo el uso de sus datos para el marketing, el servicio al cliente y el soporte técnico podría comprometer potencialmente su privacidad online, de acuerdo con CPD.
Para lograr lo anterior es necesario identificar nuevos insights y patrones que los propios usuarios tienen en todo momento; dado que el ojo humano no puede muchas veces detectar detalles tan importantes en tiempo real, inteligencia como albert solucionan este reto, gracias a su capacidad para detectar en tiempo real las interacciones y cambio de conductas que cada usuario va teniendo, esto abre la posibilidad de conectar de forma más profunda, pues cada esfuerzo publicitario se enfoca en aprovechar al máximo las variables que cada usuario tiene.
La inteligencia artificial de albert de Zoomd nos permite conectar con los usuarios sin poner en riesgo su seguridad ni la privacidad de datos, adaptándose constantemente a los cambios y normativas que tanto gobiernos como grandes empresas realizan. Albert abre la posibilidad de conectar con la audiencia a partir de los cambios que los propios usuarios van teniendo en tiempo real, realizando una segmentación mucho más certera y transparente que se refleja en que los marketeros creemos historias que unan de mejor manera a nuestras marcas con sus clientes, manteniendo siempre la privacidad y seguridad como un eje central.
Por Flavio Pallotti, director general de Zoomd en México
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