Bajo cielos azules y frente a casas destrozadas en la zona de Tampa y St. Petersburg, en Florida, el presidente Joe Biden se ha dado este domingo un paseo para ver y evaluar los daños provocados por los huracanes Helene y Milton. Tras expresar su solidaridad con los afectados, en especial aquellos que perdieron familiares y posesiones invaluables, el presidente hizo un recuento de las afectaciones que vio. “Hablé con socorristas, que han estado trabajando sin descanso. También me reuní con pequeños empresarios y propietarios de casas que se han llevado una verdadera paliza con estas tormentas seguidas. Están con los corazones rotos y sus gastos se están acumulando”, dijo, antes de resaltar y agradecer la resiliencia y solidaridad de la población del oeste de Florida.
Seguir leyendo