En vísperas de una nueva decisión de política monetaria del Banco de México (BdeM), del dato de inflación en México para la primera mitad de junio y la comparecencia de Jerome Powell, presidente de la Reserva Federal (Fed), ante el Congreso de Estados Unidos, el peso mexicano perdió fuerza ante el dólar y se alejó de las 16 unidades por dólar.
Lo anterior estuvo en línea con la fortaleza del dólar a nivel internacional, pues su índice DXY, que mide el comportamiento de la divisa estadunidense frente a una canasta de seis monedas en el mundo, se apreció 0.27 por ciento, a 102.115 unidades.
La Junta de Gobierno del banco central se reunirá el 22 de junio para tomar una nueva decisión de política monetaria.
Se espera que el BdeM mantenga la tasa de interés sin cambios, en 11.25 por ciento, no sin antes conocer ese mismo día el dato de inflación de los primeros 15 días de junio, el cual se prevé se siga desacelerando, aunque alejado del objetivo de estabilidad de precios de entre 3 y 4 por ciento.
Además, a la espera de la comparecencia, hoy miércoles, de Jerome Powell, presidente de la Fed, ante el Congreso, una cita que vigilarán al detalle los analistas para evaluar el grado de compromiso del banco central estadunidense con su previsión de adoptar dos incrementos adicionales en las tasas de interés antes del fin de año.
Proyectan que se prolongue la racha de apreciación
Analistas de OctaFX consideran que la comunicación y las decisiones de política del BdeM podrían dar lugar a una apreciación del peso. En este sentido proyectan una posible prolongación de la racha de avances, que ubicarían a la divisa mexicana en un rango de 16.80-17 unidades por dólar.
China marca sesión
La sesión de ayer estuvo marcada por las medidas avanzadas ya la semana pasada por el banco central de China, las cuales dejaron claras sus intenciones de cara a la reunión de este martes.
En un intento por reactivar la economía del gigante asiático, el Banco Popular de China rebajó en 0.10 puntos porcentuales las tasas de interés de referencia a uno y cinco años, a 3.55 y 4.2 por ciento, respectivamente.
La medida no sólo estaba ya descontada por el mercado. Algunos especialistas habían sugerido un recorte algo más agresivo, de 0.15 puntos.
Mientras tanto, Wall Street, después del feriado del lunes, regresó con caídas. El Dow Jones descendió 0.72 por ciento, para ubicarse en 34 mil 53.87 puntos; mientras el S&P 500 cedió 0.47 por ciento, a 4 mil 388.71 puntos. En tanto, el Nasdaq bajó 0.16 por ciento, a 13 mil 667.29 puntos.
El vicepresidente de supervisión de la Reserva Federal, Michael Barr, declaró que la Fed está explorando “pruebas de estrés inversas” que podrían usarse como una herramienta para hacer que los bancos sean más resistentes.
Lo anterior se produce cuando el banco central examina formas de reformar la cultura bancaria tras la quiebra de Silicon Valley Bank en marzo.
En México, la Bolsa Mexicana de Valores cayó 0.87 por ciento, para cerrar en 54 mil 365.68 puntos, afectada por la caída en el precio de las acciones de Asur, 1.84 por ciento; Autlán, 1.20; Axtel, 3.39; Banco del Bajío, 1.94; Cemex, 2.11; Gap, 2.10; Banorte, 2.24, e Inbursa, 0.52 por ciento, entre otras.
El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) cerró este martes con un desplome de 1.7 por ciento y se ubicó en 70.50 dólares el barril, después de la rebaja de tasas de interés anunciada por China –gran importador y consumidor de oro negro–, para tratar de estimular la economía nacional, que da signos de ralentización en su proceso de recuperación tras la pandemia.