Liz Truss asumió oficialmente como primera ministra británica luego de su primera reunión con la reina Isabel II, un día después de ser elegida como la sucesora de Boris Johnson.
Luego de ratificar sus tres prioridades: economía, plan energético y salud, detalló que esta misma semana anunciará cambios en dos de estos temas para fortalecer las finanzas del país y evitar un alza en los precios de la energía, que compliquen los suministros, en medio de la guerra de Rusia contra Ucrania.
Se reveló que durante el encuentro con la monarca —que por primera vez se realizó en Balmoral, Escocia, y no en el Palacio de Buckingham—, Isabel II le urgió a Truss formar un nuevo gobierno y convertirse en una líder para toda la población, especialmente cuando la región se encuentra en un momento difícil .
Posteriormente, la ahora primera ministra se dirigió a sus oficinas de Downing Street para dar su primer discurso como mandataria, en donde aseveró que con los objetivos planteados Gran Bretaña volverá a ser una nación exitosa.
Sin embargo, no delineó cuáles serán las medidas para evitar un golpe económico por el alza de precios energéticos y la inflación, pero medios locales señalan que prevé topes en los costos, hecho que Rusia ha criticado a sus socios europeos y hasta advirtió que cortaría el suministro a gobiernos que tratarán de controlar el sistema.
Asimismo, Truss destacó que su antecesor dejó las bases en otros temas de gran relevancia como el Brexit y el manejo de la pandemia, al reconocer los logros de su gestión, pese a la polémica por el partygate, que derivó en la renuncia de Johnson.