No es como acá en México. Ustedes podrán quejarse de muchas cosas de los 7 Eleven o de los OXXO, pero ahí siguen yendo casi a diario a estos comercios que de a poco mutan incluso en salón de reguetón.
En Texas, las tiendas de conveniencia, principalmente las que están en las gasolineras, suelen ser medio oscuras, de cuestionable higiene y frecuentemente desordenadas. Piensen cuántos delitos ocurren en esos establecimientos, al menos en la mente de los cineastas de Hollywood.
Pero una cadena de tiendas encontró la manera de darle la vuelta. Se llama Buc-ees, está en Texas, y lo que la llenó de clientes fue una estrategia relativamente simple: tener los baños más limpios y bonitos de todas las tiendas de su categoría. El título lo obtuvo de sus clientes que se manifestaron a través de aplicaciones como Gas-buddy. Lo demás fue de boca en boca. Es una revolución.
Las identificarán por el logo del castor de gorra roja. Si entran a una de estas, pidan el sándwich de BBQ brisket y me cuentan.
Hoy Buc-ees tiene unos 48 establecimientos, principalmente en Texas. ¿Y por qué este columnista anda antojando comida tex mex?
OXXO llega a EU
Sucede que la propietaria de OXXO, que cuenta más de 30 mil tiendas, es un monstruo que se le apareció al castor en cuestión justamente en Texas. Oficialmente llegó a Estados Unidos esta compañía que opera en Sudamérica y en Europa.
Ayer avisó que compró, miren nomás, 249 tiendas de conveniencia a la empresa Delek US Holdings, que las tiene ubicadas en gasolineras que venden combustible bajo las marcas DK y Alon, en esa zona de carreteras que unen El Paso con Dallas. El trato es por la suma de 385 millones de dólares. ¿Eso es mucho o poco?
Vamos por partes. Si OXXO estuviera comprando coches, esos 249 activos quizás parecerían una flotilla de reparto usada.
Fieles a su origen regiomontano, los de FEMSA, guiados en esta transacción por José Antonio Fernández Garza-Lagüera, aprovecharon una posible ganga.
Los de Delek van mal. Al inicio del año reportaron ventas por 3 mil 227 millones de dólares, que son inferiores a las de tres mil 924 millones de 2023, que a su vez que a su vez fueron más bajas que las de cuatro mil 459 millones de 2022.
Por esa razón, casi la mitad de los analistas financieros que siguen sus acciones, recomiendan deshacerse de ellas, de acuerdo con reportes de Bloomberg.
Sus principales propietarios son los gigantes fondos de inversión Vanguard y Blackrock, que también tienen una participación en Femsa, aunque minoritaria. Vaya, ambos gigantes de paso darán una limpiadita a sus activos con el acuerdo.
Un titán de Monterrey
No es lo mismo que esas 249 tiendas sean administradas por Delek, que por Femsa Proximidad, dirigida por Fernández Garza-Lagüera, subsidiaria a cargo de la operación de los OXXO, la firma global cuyo origen siempre estará atado a Monterrey.
Solo de abril a junio de este año, abrieron 404 tiendas que operan no solo como puntos de venta, sino de servicios financieros, de telecomunicaciones, incluso publicitarios para sus proveedores.
El mercado al cual llega el OXXO en Estados Unidos vale 850 mil millones de dólares anuales distribuidos en más de 150 mil ubicaciones y, para la fortuna de los accionistas de Femsa, está sumamente fragmentado, lo que significa que este titán de 30 mil cabezas globales bien podría sacar la escoba y recoger todo lo que esté a su paso.
La compañía tenía en junio unos seis mil 653 millones de dólares en efectivo, más 945 millones por la venta de su negocio Jetro Restaurant Depot y otros 450 millones que van a pagarles por la venta de Torrey. ¿Van a poner baños en los OXXO?