Muere el productor Roger Corman, genio del cine de terror y crimen: ‘Yo hacía películas, solo eso’

El productor de cine estadounidense Roger Corman, artífice de cientos de películas de terror, ciencia ficción y crimen de bajo presupuesto, y apodado “el rey de la serie B”, ha fallecido a los 98 años, según anunció su familia a última hora del sábado.

En un comunicado en su página oficial de Instagram a medianoche, su esposa Julia y sus hijas Catherine y Mary comunicaron que Corman falleció el pasado jueves en su casa de Santa Monica (California), rodeado por sus familiares, y le dedicaron unas palabras de homenaje.

“Sus películas fueron revolucionarias e iconoclastas, y capturaron el espíritu de una era. Cuando le preguntaban cómo le gustaría ser recordado, decía: yo hacía películas, solo eso”, expresaron sus allegadas, describiendo al también cineasta como un hombre generoso, amable y de gran corazón.

El mundo del cine se hacía eco de la noticia este domingo, con dedicatorias, por ejemplo, como la del español Juan Antonio Bayona asegurando en X que “no existiría el cine tal y como lo entendemos sin alguien como Roger Corman”, y recordando ver de niño El hombre con rayos X en los ojos.

Gale Ann Hurd, productora de la saga Terminator, que recordó a Corman como su primer jefe, su “mentor para toda la vida” y su héroe, lo describió como “uno de los mejores visionarios en la historia del cine”.

Otro maestro del terror, el compositor y cineasta John Howard Carpenter, su colaborador, lo describió como uno de los directores “más influyentes” de su vida: “Dio forma a mi infancia con filmes de ciencia ficción y la saga de Edgar Allan Poe”, dijo.

¿Quién fue Roger Corman?

Roger Corman nació en Detroit, Estados Unidos, en 1926; en 2009 recibió el Oscar honorífico.

Desde 1955, Corman ayudó a crear cientos de películas de serie B como productor y director, como Black Scorpion (El escorpión negro), Bucket of Blood y Bloody Mama (Mamá sangrienta).

Él tenía una gran habilidad para identificar el talento y contrató a aspirantes a cineasta como Francis Ford Coppola, Ron Howard, James Cameron y Martin Scorsese.

Martin Scorsese filmó para él Boxcar Bertha (El tren de Berta) (1972), Jack Nicholson debutó en el cine de su mano con The Cry Baby Killer (Grita, asesino) (1958), Robert de Niro le debe uno de sus primeros papeles con Bloody Mama (Mamá sangrienta) (1970) y Francis Ford Coppola hizo con él su ópera prima con Battle Beyond the Sun (Batalla más allá del sol) (1962), entre otros.

Menospreciado por la historia canónica del cine, Corman fue, sin embargo, un padrino más que generoso de incontables talentos, y se convirtió en una figura de culto entre los aficionados al séptimo arte, pese a no contar con los medios de las grandes productoras.

“Hay muchas limitaciones asociadas a trabajar con un presupuesto bajo, pero al mismo tiempo hay algunas oportunidades”, dijo Corman en un documental de 2007 sobre Val Lewton, director de La mujer pantera, de la década de 1940, y otros clásicos de la cultura underground.

“Uno puede arriesgarse un poco más. Puede experimentar. Puede encontrar una forma más creativa de resolver un problema o representar un concepto”, dijo.

Los directores de serie B de Corman recibían presupuestos diminutos y a menudo instrucciones de terminar las películas incluso en cinco días.

Cuando Howard, que más tarde ganaría un Oscar a mejor director por A Beautiful Mind (Una mente brillante), pidió medio día más para regrabar una escena de Grand Theft Auto en 1977, Corman le dijo “Ron, puedes volver si quieres, pero aquí no habrá nadie más”.

Él produjo más de 300 películas y dirigió medio centenar de ellas, incluyendo clásicos como:

Bucket of Blood (Un cubo de sangre) (1959)The Masque of the Red Death (La máscara de la muerte rojo) (1964)The Wild Angels (Los Ángeles del Infierno) (1966)Death Race 2000 (La carrera de la muerte del año 2000) (1975) Grand Theft Auto (1977): tras fundar su compañía New World Pictures.

En 1963, Corman inició una serie de películas basadas en la obra de Edgar Allan Poe. La más notable fue El cuervo, que reunía a Nicholson con el veterano del cine de terror Boris Karloff, Peter Lorre y Basil Rathbone. Dirigida por Corman en un inusual calendario de tres semanas, la cinta de terror obtuvo buenas críticas, algo poco común en sus películas. Otra adaptación de Poe, La casa Usher, fue considerada como digna de preservación por la Biblioteca del Congreso.