Según quién se imponga en las elecciones presidenciales en Estados Unidos este martes —y el resultado definitivo puede tardar en conocerse, dado lo tozudo del empate entre los dos candidatos en las encuestas—, la política exterior de la gran potencia mundial asumirá direcciones muy diferentes: el aislacionismo del republicano Donald Trump o el multilateralismo de la era de Joe Biden que la demócrata Kamala Harris promete continuar. En una batalla en la que las fuerzas de ambos están tan ajustadas como en la de este año, y en la que una mayoría de votantes declara otorgar gran importancia a los asuntos internacionales, esas posiciones pueden acabar inclinando la balanza de un lado o del otro.
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