La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) está convertida en un brazo político de Morena en su intento de imponer cuatro consejeros del Instituto Nacional Electoral (INE) que sustituirán en abril del 2023 a Lorenzo Córdova, Ciro Murayama, Adriana Favela y José Roberto Ruiz, aseguró el Partido Acción Nacional.
“La CNDH perdió autonomía desde que el presidente (Andrés Manuel López Obrador) y su partido impusieron mediante un fraude en el Senado a Rosario Piedra como titular, pero se desconocía el grado de sometimiento del que sería capaz, hasta que propuso a dos morenistas para integrar el comité técnico de evaluación que se encargará de examinar a los aspirantes a consejero del INE”, dijo el CEN del PAN.
Recordó que el Comité Técnico debe integrarse por tres personas propuestas por la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados, dos por la CNDH y por más del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI). “Obviamente, si el comité se integra por morenistas, los propuestos al pleno serán morenistas”, dijo.
Cabe destacar que la CNDH hizo pública la designación de María del Socorro Puga Lúevano y Ernesto Insunza Vera, para integrar el Comité. La primera, quien se ha expresado en contra del INE, cuenta con una carrera profesional trunca y una certificación en “yoga de la risa”.
En ese marco, el PAN dijo que “el uso de la CNDH como brazo político de Morena se inscribe en un contexto más amplio donde destacan la obsesión presidencial por concentrar el poder en su persona, la estrategia para controlar el proceso electoral y decidir a quién otorgarle el triunfo, la creciente militarización del país y el desplazamiento de los civiles en el diseño y aplicación de políticas públicas”.
Consideró que el nombramiento de María del Socorro Puga Luévano y Ernesto Isunza Vera son inaceptables. “Es evidente que su único mérito es su cercanía con el gobierno y que irían al Comité Técnico simplemente a recibir órdenes sobre por quién votar”, planteó.