En vísperas de las elecciones intermedias en Estados Unidos para renovar la Cámara de Representantes y el Senado, que activan el temor a un bloqueo político, los mercados financieros arrancan la primera sesión de la semana en terreno positivo.
Mañana martes se llevarán a cabo unas elecciones en Estados Unidos, en donde los mercados están atentos a la discusión del techo de la deuda, el cual siempre se entrampa cuando está dividido el poder entre demócratas en la presidencia y republicanos en las Cámaras, pues se prevé que estos últimos ganen ambas Cámaras.
El mercado de divisas registra movimientos más significativos en el inicio de la semana, como ya sucedió el pasado viernes, cuando el dólar registró una notable caída. Así, el índice del dólar, el DXY, que mide el comportamiento de la divisa estadunidense frente a una canasta de seis monedas internacionales, se deprecia 0.42 por ciento, a 110.42 puntos.
Ante la espera este jueves de la publicación de la inflación de Estados Unidos de octubre, que podría mostrar una contención de la subida de precios, y ese mismo día la decisión de política monetaria del Banco de México (BdeM), en que se prevé que la autoridad lleve el precio del dinero a 10 por ciento.
El peso mexicano sigue su fortaleza, al apreciarse en la apertura frente al dólar un 0.07 por ciento, para operar en alrededor de 19.4858 unidades por dólar.
Por su parte, el euro recupera incluso la paridad frente al dólar para alcanzar el 5.0 por ciento de remontada desde sus mínimos. Las señales tanto de los mercados como de los analistas desplazan ahora el riesgo de caídas al dólar. La libra británica acelera igualmente su ascenso, por encima de los 1.14 dólares.
En tanto, Wall Street abre al alza, pero minutos más tarde el Nasdaq vuelve a terreno negativo, al caer 0.28 por ciento; mientras que el Dow Jones sube 0.34 por ciento y el S&P 500 avanza un marginal 0.09 por ciento.
En México, la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) avanza 0.67 por ciento, a 51 mil 485 puntos.
Los futuros del crudo WTI cotizan a la baja, 0.05 por ciento, en torno a 92.56 dólares por barril, niveles no vistos desde finales de agosto, ante una oferta limitada y una demanda sombría. Por el lado de la oferta, la OPEP+ mantiene un recorte de la producción en 2 millones de barriles por día, mientras crece la especulación de que el cártel del petróleo intervendrá aún más en los mercados para apuntalar los precios.