Human Rights Watch llamó al presidente de México a adoptar medidas urgentes para fortalecer el mecanismo de protección del gobierno federal, cesar el hostigamiento a periodistas que critican al gobierno y asegurar que los fiscales pongan fin a la impunidad casi absoluta de estos crímenes.
En el marco del Día Mundial de la Libertad de Prensa, la organización internacional mostró su preocupación por al menos ocho periodistas asesinados en lo que va del 2022, más que en todo el 2021 y en segunda posición después de Ucrania, donde al menos 12 periodistas han sido asesinados, la mayoría mientras cubría la guerra, según el Comité para la Protección de los Periodistas.
“El presidente López Obrador no sólo no ha abordado la violencia contra la prensa, sino que además sigue utilizando sus conferencias mañaneras para hostigar e intimidar a periodistas”, indicó Tyler Mattiace, investigador para las Américas de Human Rights Watch, quien también advirtió que “este año va en camino a convertirse en el más letal de la historia para los periodistas en México”.
En este contexto, la organización indicó que México es uno de los países más peligrosos del mundo para los periodistas, en cuanto a la cantidad de asesinatos cada año y debido a que rara vez las autoridades esclarecen estos crímenes o enjuician a los responsables.
Ello pese a que durante las conferencias de prensa matutinas del presidente, funcionarios del gobierno han exhibido los nombres y fotografías de personas que alegan son responsables. Por lo general, se trata de individuos que han sido detenidos, pero que todavía no han sido juzgados o condenados y, en ocasiones, no han sido llevados ante un juez.
“Cada día, periodistas valientes en todo México se exponen al riesgo de violencia o muerte para hacer su trabajo y mantener informada a la población”, señaló Mattiace. “En vez de atacar y denigrar a los periodistas, el presidente López Obrador debería respaldarlos”, enfatizó.
Garantizar derecho
Por su parte, Artículo 19 recordó que en México se han asesinado 153 periodistas, desde el 2000, mientras que los comunicadores se enfrentan a una falta de libertad para ejercer el periodismo, y la escasez de garantías del derecho a la información, clave para una democracia.
La organización hizo un llamado a los gobiernos de México, Cuba, Guatemala, Honduras, Nicaragua y El Salvador a garantizar la libertad de prensa, la independencia y el pluralismo como prerrequisitos para garantizar la información como un bien público de las sociedades.
Ya que observa con preocupación cómo quienes ejercen el periodismo en la región se enfrentan cada vez más a la obstinación de gobiernos con prácticas autoritarias que tienden a limitar la libertad de prensa.