La Cámara baja del Congreso de Estados Unidos continúa paralizada, sin poder votar textos, por falta de presidente debido a una guerra interna entre republicanos, que han previsto una votación el martes para poner fin al caos.
Sin presidente, la Cámara de Representantes no puede votar ningún paquete de ayuda para Ucrania, invadida por Rusia, ni para Israel, en guerra contra el movimiento islamista palestino Hamás. Tampoco puede votar el presupuesto estatal federal, que expira dentro de pocas semanas.
Lleva sin líder desde la destitución de Kevin McCarthy el 3 de octubre, víctima de las divisiones entre moderados y partidarios del expresidente Donald Trump.
Desde entonces, los conservadores no han podido ponerse de acuerdo sobre un sucesor.
El Congreso tiene dos cámaras: el Senado, donde los demócratas de Joe Biden son mayoría, y la Cámara de Representantes, en manos de los republicanos.
Después de una semana de alta tensión, el congresista Jim Jordan, muy cercano a Donald Trump, es actualmente el único candidato republicano en liza.
«Debemos permanecer unidos y volver al trabajo», afirmó Jordan este lunes en X.
Su candidatura se someterá a votación en sesión plenaria el martes a las 12H00 (16H00 GMT).
Por el momento el congresista no cuenta con suficiente apoyo para conseguir el puesto. Pero varios moderados, que se habían opuesto firmemente a su candidatura considerada demasiado derechista, se alinearon con él el lunes por la mañana.
El grupo parlamentario mantendrá un encuentro al final del día para otra reunión a puerta cerrada, en la que se han prohibido los teléfonos móviles, con la esperanza de enterrar el hacha de guerra.
La presión aumenta, entre otras razones porque el Senado prevé debatir esta semana varias medidas para Israel, empezando por la confirmación de un nuevo embajador.
El Partido Demócrata de Joe Biden es minoritario en la Cámara Baja y, por lo tanto, asiste como espectador a las negociaciones. Pero, en teoría, podría alcanzar una alianza con los republicanos moderados para poner fin a esta situación.
«Los extremistas han destruido la Cámara de Representantes», dijo el lunes el líder demócrata Hakeem Jeffries, quien estimó que «sólo una coalición que trascienda los partidos» puede ponerla de nuevo en pie.