Ante el reto que le representará al Banco de México (BdeM) desligarse de la Reserva Federal (Fed), una vez que ambas autoridades monetarias hayan ajustado al alza sus tasas de referencia para paliar su inflación correspondiente, el peso mexicano podría operar en un rango amplio de entre 19.5 y 21.5 unidades por dólar el próximo año, prevé Valentín Martínez, subdirector de estrategias de portafolio de inversión de Sura.
El especialista de la firma de gestión de inversión afirmó que cuando los inversionistas internacionales observan los números de México: resiliencia en su crecimiento económico; control de las finanzas públicas; diferencial de tasas de referencia entre México y Estados Unidos, principalmente, ven una economía atractiva para invertir.
“El tipo de cambio en México, en niveles de 19.47 pesos por dólar, ha sorprendido. Sin embargo, aunque 80 por ciento del comportamiento de la moneda nacional se explica por el contexto internacional; la proporción que explica la nacional luce bien ante sus ojos en las pantallas de Bloomberg (compañía estadunidense que proporciona datos económicos y financieros; noticias; análisis, principalmente)”, aseveró Martínez.
En conferencia de prensa, con motivo de la presentación de “Inversión Pro”, estrategia pensada para sacar la mayor rentabilidad de los mercados financieros para los inversionistas en el país que quieran invertir en fondos de inversión, Valentín Martínez explicó que los bancos centrales cada vez se acercan más al término de seguir subiendo tasas de referencia (el costo del crédito), por lo que el reto será ahora acertar en los tiempos que se requieren para salir de esa restricción monetaria e ir ajustando otra vez a la baja las tasas.
Eso, añadió, dependerá de cada economía, qué tan rápido ha ido a la baja la tasa de inflación, su crecimiento económico y las condiciones económicas. De ahí que el tipo de cambio será la variable más expuesta a estos cambios. No obstante, al menos que pase algo muy radical en Ucrania, China, Estados Unidos o Europa, el peso mexicano operará arriba de 21.50 unidades en el corto plazo, pero no prevé que se salga de control más allá de este nivel.
Martínez comentó que en 2023 la inversión en bonos será más socorrida entre los inversionistas, pues el mercado accionario tendrá otro año volátil y lleno de incertidumbre, ya que las empresas empiezan a reducir sus proyecciones de rentabilidad para el próximo año.
Sostuvo que los niveles del tipo de cambio son interesantes para adquirir dólares, siempre y cuando se requiera adquirirla.
Vehículo adecuado para invertir
La industria de fondos de inversión, un instrumento de ahorro que aglutina las aportaciones hechas por un número de personas que quieren invertir sus ahorros, alcanzó activos administrados en México de 2.8 billones de pesos a septiembre pasado, lo que equivale a 10 por ciento del producto interno bruto (PIB) del país.
Tan sólo al cierre de 2016, los fondos de inversión en el país administraron 2.01 billones de pesos.
De acuerdo con Fernando Pizzuto, director ejecutivo de inversiones Sura, la industria de fondos de inversión sigue creciendo en el país y lo seguirá haciendo, siempre y cuando genere confianza y rendimientos a los inversionistas.
De ahí que a través de 620 fondos se atienden a 4.16 millones de inversionistas; un avance importante si se considera que en diciembre de 2016 se contabilizaron 2.18 millones de cuentas, con 587 fondos de inversión (renta fija o variable).
“El 75 por ciento de los clientes que manejan sus propios portafolios tienen rendimientos inferiores. Es por ello la importancia de contar con asesores profesionales, toda vez que a la gente todavía le gusta que le expliquen lo que sucede con su inversión”, destacó Pizzuto.