Una red de amigos y familiares habría sido el vehículo mediante el cual el dirigente nacional del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas, adquirió varias propiedades en Campeche a precios bajos, para después donárselos y posteriormente revenderlos a precios superiores, sin que esto dejara algún rastro en sus declaraciones patrimoniales.
La investigación, nombrada “La red de Alito para triangular dinero con la compra-venta de inmuebles”, realizada por Eduardo Buendía, colaborador de Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI), acusa al priista de haber utilizado su influencia política y poder para cometer estos actos.
Tras una revisión que se hizo al Registro Público de la Propiedad y de Comercio (RPPyC) y al Instituto de Información Estadística, Geográfica y Catastral (Infocam) de Campeche, se establece que el también diputado, así como su hermano, Emigdio Gabriel Moreno; su madre, Yolanda Mercedes, y Juan José Salazar Ferrer, su arquitecto de cabecera, poseen 35 inmuebles y terrenos en la entidad.
Apunta que, en su declaración patrimonial presentada a finales del 2021, Moreno Cárdenas notificó 13 inmuebles adquiridos entre marzo del 2012 y mayo del 2021, por un monto de 12 millones 963 mil pesos, periodos durante los cuales fue diputado, gobernador y luego dirigente del CEN y, nuevamente, diputado de la actual legislatura.
Según consta, uno de estos predios, con extensión de 39.2 mil metros cuadrados, fue adquirido a Desarrollo Comercial y Residencial SA de CV, al que pagó menos de cuatro pesos por metro cuadrado.
Ahora, el terreno forma parte de “Campeche Hills”, descrito como un exclusivo complejo residencial cuyos lotes se venden actualmente a un precio de dos mil pesos por metro cuadrado.
La investigación también apunta que, durante noviembre del 2016, mientras era gobernador, cedió cinco lotes a su madre, las cuales adquirió un año antes.
Entre los predios donados se encuentra uno denominado Miramar, con una extensión de más de 10 hectáreas, el cual adquirió al hijo del exgobernador de la entidad Eugenio Echeverría Castellot, cuyo costo fue de 390 mil pesos.
De las propiedades cedidas a su madre, cuatro fueron aseguradas por la Fiscalía General de la República (FGR) en diciembre del 2019, como parte de una investigación en contra de Moreno Cárdenas por el presunto delito de enriquecimiento ilícito; sin embargo, en septiembre del año siguiente fueron suspendidas las retenciones y las propiedades volvieron al poder del priista.
Más adelante, apunta que la “donación” de predio también incluyó dos terrenos en el “lujoso” fraccionamiento Lomas del Castillo, en el que existen 140 lotes, de los cuales 22 pertenecen a Alejandro Moreno, su madre, hermano y al arquitecto.
Además, se señala que 11 meses antes de que el priista asumiera el cargo como gobernador, adquirió un terreno de 812 metros cuadrados con la empresa Constructores Unidos de Campeche SA de CV, la cual fue beneficiada entre 2015 y 2017 con contratos millonarios de obra pública.
Tras la publicación de la investigación, el dirigente priista aseguró, al ejercer su derecho de réplica, que la información difundida es falsa.
Sostuvo que cada una de sus propiedades aparecen dentro de sus declaraciones patrimoniales, por lo que afirmó que los señalamientos acerca de haber puesto los inmuebles y predios a nombre de otras personas es “una falacia”; además, señaló que las ubicaciones proporcionadas son incorrectas.
Respecto a las propiedades que le fueron aseguradas por la FGR entre el 2019 y el 2020, indicó que se realizó una minuciosa investigación que concluyó con el ejercicio de la no acción penal por parte de la dependencia.