La primera denuncia, presentada directamente ante Ministerio Público, fue dada a conocer este sábado 4 de junio por el periodista Salvador García Soto. Ahora, Crónica da a conocer un segundo caso, llevado el 25 de mayo pasado ante la Secretaría de las Mujeres de la capital y que condujo a las medidas de protección dictadas por el juez de Control Edgar Campos Burgos. En este proceso, la Fiscalía capitalina, a cargo de Ernestina Godoy, ya fue enterada del caso. A pesar de que el asunto ya no puede ser omitido por la Fiscalía de la ciudad, la víctima notificó a Crónica que desea presentar su denuncia personalmente ante el Ministerio Público esta semana, después de que mejore una lesión en el pie que, por cierto, también fue pretexto para que el titular de Seduvi la acosara.
“Que no sabes que estás con el hombre mas importante de la Ciudad de México, y te niegas a los placeres que te puedo dar, tengo dinero, estoy solo, estoy todo el día aquí y tu también y no quieres nada conmigo, yo no sé de que se quejan las mujeres si les encanta…”, es lo que le dijo el titular de Seduvi a la víctima de acuerdo a la relatoría hecha en la Secretaría de las Mujeres, “no hagas algo de lo que te puedas arrepentir, yo voy a actuar al fin y al cabo soy el secretario”.
La nueva denunciante, de iniciales RP, optó por pedir protección después de esas palabras y de que lo verbal pasara a intentos de tocar sus senos y entrepierna, “en su afán de impedirme la salida (de su oficina), siempre me jaloneaba y me sujetaba del brazo”.
RP había conocido a Gómez Cruz en 2019, cuando la mujer trabajaba en la alcaldía Azcapotzalco y él era el enlace del gobierno central. En el 2020, Gómez Cruz, contactó a RP para ofrecerle trabajar con él. La mujer no aceptó pues tenía para entonces un puesto en un municipio mexiquense y, una vez que ese encargo terminara, pensaba emprender un negocio propio. Pero en septiembre del 2021, Gómez Cruz la volvió a contactar para invitarla a un evento en un campo de beisbol comentándole que iban acudir empresarios y que podía hacer relaciones públicas para su proyectado negocio. En lugar de ello, el ya nombrado secretario le ofreció nuevamente trabajo y ella comenzó a laborar en Seduvi, por honorarios, adscrita a la oficina del titular.
El primer indicio se presentó de inmediato: “Ahora vamos a estar más cerca, porque la observaba de lejos más de lo que usted se imagina, déjeme ver en dónde estará más cerca de mí”, fue la nada profesional forma de ubicarla en la oficina. “Le comenté que yo solo estaría para trabajar”, fue la respuesta de RP.
A principios de este año, terminando una reunión de trabajo (en lo que parece ser un modus operandi), Gregorio Gómez le pidió a la mujer que pasará a su oficina invitándola a un viaje a Las Vegas por cuatro días argumentando, “te imaginas todo lo que te haría, de todas formas, de todas maneras, de todos colores y de todos sabores, tendrías sexo como nunca lo has tenido, solo tú decídelo”.
RP le contestó que no necesitaba viajes ni ese tipo de propuestas y se salió de la oficina.
El 2 de febrero, RP recibió una mensaje del secretario, “te hace falta relajarte, quieres un masaje, si quieres mañana”, al día siguiente en su trabajo el secretario le dice “el masaje será en mi departamento, desnuda, te relajo con mis manos y después te la meto”. La mujer le respondió: “está loco, ya le dije que deje de acosarme, no quiero nada con usted yo vengo a trabajar”.
El 23 de mayo de 2022, RP tuvo un accidente en el que se lesionó un tobillo. Antes de comenzar a trabajar desde casa para lograr recuperarse, acudió a la oficina del secretario para revisar pendientes e informarle que se iba ausentar.
“En ese momento cierra la puerta de su oficina me pide pasar a la antesala y que le enseñara el pie, a lo que le réferi que no era necesario”. La denuncia narra que el secretario indicó que sabía curar huesos “y te voy a decir si es fractura o no, por eso necesito tocarte”.
“Me vi tan presionada y con la finalidad de salirme, a la distancia le enseño mi pie, se acerca y me lo toca, diciéndome que no pensaba que fuera una fractura”
Es cuando, de acuerdo a la acusación, el secretario Gómez refiere: “si te duele estés en una posición en la que puedes abrir las piernas y se te puede quitar el dolor, enséñame”.
La convalecencia de RP derivó en nuevas agresiones por teléfono y a que la mujer pensara finalmente en renunciar.
Finalmente, la mujer decidió acudir a la Secretaría de las Mujeres para interponer una queja por los ataques en su contra. De allí, el tema fue expuesto ante la Fiscalía y ante el Juez de Control Campos Burgos. Ambas instancias encontraron suficientes elementos para actuar y dictar protección a RP.
La denunciante había logrado medidas de protección desde el mismo 25 de mayo y optó por hacerlo público a raíz de que se enteró de que otra mujer había pasado por lo mismo. La denuncia no es anónima, se ha presentado con nombre y apellidos, pero el uso de siglas en la denuncia y en esta nota corresponden a la protección de una probable víctima.