Una de las principales cargas económicas en la que nos adentramos la mayoría más tarde o más temprano, es en el préstamo hipotecario que pedimos al banco. De hecho es bastante habitual solicitar una buena cantidad de dinero para pagar a lo largo de los próximos 25 o 30 años.
Para muchos esta es la única opción disponible con el fin de poder disponer de su propio hogar, todo para abandonar el nido familiar o evitar los alquileres. Evidentemente, dependiendo de nuestros ahorros o posibilidades económicas, la hipoteca dura más o menos años. Pero seguro que muchos os habéis visto en la obligación de pedir un préstamo de estas características con varias décadas de duración.
De ahí que uno de los principales objetivos de la mayoría de los hipotecados sea finalizar el pago de una vez por todas. Sin duda alguna, una vez hayamos abonado la última letra a la entidad bancaria, es una razón importante para celebrarlo. Ya no solo por el ahorro económico del que vamos a disfrutar, sino porque la casa en la que vivimos finalmente es nuestra del todo. Eso sí, hay que tener en consideración, algo que no todo el mundo sabe, que para finalizar con la hipoteca de verdad debemos llevar a cabo una serie de procesos posteriores.
Estos pasos que os vamos a describir a continuación nos permitirá evitar problemas con el banco en el futuro si nos disponemos a vender esa misma vivienda, por ejemplo. Incluso nos podrá ahorrar un dinero en gestiones si se da esa circunstancia que os comentamos. A continuación os hablaremos de una serie de trámites que debéis llevar a cabo una vez hayáis pagado la última letra del préstamo hipotecario.
Gestiones para terminar con la hipoteca para siempre
Eso no significa que, una vez pagada la última letra y con la alegría que esto conlleva, tengamos que seguir abonando recibos. Más bien lo que debemos hacer es una serie de gestiones y papeleos para finalizar realmente con el préstamo hipotecario sobre nuestra casa, que es precisamente en lo que nos centraremos ahora.
En estas líneas os vamos a describir cuáles son los pasos a dar para terminar con todo ello de manera definitiva y una vez por todas.
- Pedir un certificado. Una vez hemos pagado la última cuota tras tantos años, debemos acercarnos a la entidad bancaria correspondiente y solicitar un certificado de deuda cero sobre el préstamo hipotecario.
- Escritura de cancelación de hipoteca. Este es el segundo escrito que deberíamos solicitar, algo que nos proporcionará un notario al que debemos acudir.
- Registrar la escritura de nuestra casa. Este es el último trámite al que os hacemos mención y que podéis hacer en cualquier oficina del Registro.
A partir de ahí sí que podemos confirmar que hemos finalizado con nuestra hipoteca y además estos pasos nos facilitarán su posible posterior venta en el futuro. De lo contrario, la entidad bancaria con la que teníamos el préstamo podría volver a cobrarnos por llevar a cabo todo esto que os hemos contado y así poder vender la vivienda a terceros.
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Author: David Onieva